La Inspección de Trabajo y Seguridad Social para el ejercicio 2016 ha puesto en marcha una línea de actuaciones para detectar el fraude según los siguientes criterios: – Contratación laboral. – Economía sumergida. – Prevención de riesgos laborales. – Fraude a la seguridad social. Dichos criterios se centrarán principalmente en los sectores de construcción, agrario, sanitario y hostelería. Como todos sabemos, desde hace años siempre ha existido economía sumergida, el empleo no declarado, los objetos de los contratos no eran válidos, el trabajo irregular y fraude a la seguridad social (realización de horas extraordinarias y no pagadas o compensadas, trabajar sin estar dado de alta, estar dado de alta con una jornada inferior a la que se realiza)  etc. ¿Dónde estaban hace años los inspectores de trabajo y de seguridad social? ¿No había fraude? Como seguimos en época de crisis ¿dichas actuaciones se deben verdaderamente a un control porque hay ahora más denunciantes sobre la situación de empleo irregular que les afecta directamente a ellos mismos? ¿Por qué esos criterios de actuación protegen a los trabajadores afectados por dichas irregularidades? o ¿Por qué en realidad dichas actuaciones se deben a un interés de recaudación?

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